Los periodos largos de inactividad del músculo esquelético (por ejemplo, reposo en cama prolongado o inmovilización de un miembro) resultan en una pérdida de proteína muscular y en atrofia de fibras. Esta atrofia muscular inducida por desuso se debe tanto a una disminución de la síntesis de proteínas como a un aumento de la degradación de proteínas. Aunque numerosos factores contribuyen a la regulación de las tasas de degradación de las proteínas y a la síntesis en el músculo esquelético, se ha establecido que la inactividad muscular prolongada tiene como resultado un aumento en la producción de radicales en las fibras musculares inactivas. Además, este aumento en la producción de radicales juega un papel importante en la regulación de las vías de señalización sensibles a redox que regulan tanto la síntesis de proteína como la proteólisis en el músculo esquelético. De hecho, desde hace más de 20 años se sugirió que la suplementación antioxidante tiene el potencial de proteger los músculos esqueléticos contra la atrofia de las fibras inducida por la inactividad. Desde este planteamiento original, la evidencia experimental ha implicado que algunos compuestos con propiedades antioxidantes son capaces de retardar la atrofia muscular inducida por la inactividad. El objetivo de esta revisión es discutir el papel que los radicales juegan en la regulación de la atrofia del músculo esquelético inducida por la inactividad y proporcionar un análisis de la literatura reciente que indica que antioxidantes específicos tienen la posibilidad de diferir la atrofia muscular por desuso.
Sports Med. 44(Suppl 2):155-165.