RESUMEN
La popularidad de los deportes de resistencia ha aumentado y los atletas en todos los niveles están buscando diferentes maneras para mejorar su rendimiento mediante el entrenamiento y la nutrición. Para el ejercicio de resistencia que dura 30 min o más, probablemente los factores que contribuyen más a la fatiga son la deshidratación y la depleción de carbohidratos, mientras que los problemas gastrointestinales, la hipertermia y la hiponatremia pueden disminuir el rendimiento en el ejercicio de resistencia y pueden poner en riesgo la salud, especialmente en eventos más prolongados (>4h). Aunque las concentraciones altas de glucógeno muscular al inicio pueden ser beneficiosas para el ejercicio de resistencia, no necesariamente esto tiene que lograrse por el protocolo tradicional de supercompensación. Se puede desarrollar una estrategia nutricional personalizada que tenga como objetivo entregar los carbohidratos al músculo activo a una tasa que depende de la intensidad absoluta del ejercicio, así como de la duración del evento. Los atletas de resistencia deben intentar llevar al mínimo la deshidratación y limitar al 2-3% la pérdida de masa corporal por sudoración. Frecuentemente ocurren problemas gastrointestinales, sobre todo en las carreras de larga distancia. Los problemas parecen ser altamente individuales y quizá determinados genéticamente pero también pueden estar relacionados con el consumo de soluciones muy concentradas de carbohidratos, bebidas hiperosmóticas, así como la ingesta de fibra, grasa y proteína. Ocasionalmente se ha reportado la hiponatremia, especialmente entre los competidores más lentos que consumen mucha agua u otras bebidas bajas en sodio. Aquí presento una revisión exhaustiva de los resultados de investigaciones recientes y con base en esto sugiero nuevas guías para los deportistas de resistencia, las cuales son más detalladas y permiten un enfoque más individualizado.
J. Sports Sci. 29 Suppl 1:S91-99