Este artículo revisa diversas técnicas clínicas de evaluación de la hidratación para detectar cambios en el estado de hidratación, aporta los criteros para los métodos más precisos y confiables, y ofrece una guía útil para los atletas y entrenadores. Las técnicas más comunes de evaluación incluyen el agua corporal total, la osmolalidad del plasma, osmolalidad de la orina y la masa corporal. La medición de la osmolalidad del plasma y del agua corporal total son las mejores formas para evaluar las necesidades de líquido pero son técnicamente difíciles y no muy prácticas. Una forma más práctica para que los atletas conozcan sus necesidades de líquidos es 1) medir día a día su peso corporal, 2) monitorizar la frecuencia de micción y color de orina y 3) poner atención en la sed. Mantener un peso corporal estable, orinar frecuentemente y de color pálido, y tener sed ocasionalmente son indicadores de un buen equilibrio del agua corporal. Aunque cualquiera de éstos puede ser suficiente para monitorear, se debe poner atención a los tres para asegurar un mejor estado de hidratación.
Samuel N. Cheuvront, Ph.D., Michael N. Sawka, Ph.D. FACSM
octubre 2006
Temas:
HIDRATACIÓN